Aquí presentamos una escalera forrada sobre un cerámico rustico. El diseño y confección es algo a tener muy en cuenta a la hora de darle un toque diferente. en este caso hemos optado por dejar una junta perimetral de cinco milímetros en uno de los lados que recorre parte del tramo de escalera. En el lado de pared la terminamos con un rodapié lacado. La profundidad visual de la junta es la que marca la diferencia con respecto a un acabado mas convencional.
La pretensión era sacarle el máximo partido a una escalera que no tenia un largo de peldaño demasiado grande y que en principio nos pudiera quedar con un aspecto que no transmitiese nada fuera de lo común. Otro acabado es el canto recto del peldaño con líneas rectas que le aporta un plus de diseño.